¿Cómo afectan la evolución de la tecnología y la política a la transformación hacia un futuro de bajas emisiones?
Basque Centre for Climate Change (BC3), en colaboración con otras entidades de investigación europeas, ha analizado la influencia de estos factores en las trayectorias trazadas por el Grupo Intergubernamental de Expertos del Cambio Climático (IPCC)
Los resultados del análisis, publicados en Nature, están basados en los datos publicados en los dos últimos informes de evaluación del estado de la investigación del cambio climático a nivel mundial del organismo de las Naciones Unidas, abarcando una década de proyecciones
El Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC, siglas de su nombre en inglés) de las Naciones Unidas evalúa periódicamente el estado de la investigación del cambio climático a nivel mundial. Sus informes son la fuente informativa central para la política climática internacional, ofreciendo datos objetivos sobre las causas y consecuencias, así como posibles estrategias de mitigación.
Uno de los componentes esenciales que presentan estas publicaciones son las trayectorias de las emisiones de gases de efecto invernadero. Los datos incluidos en los dos últimos informes, finalizados en 2014 y 2022, han sido la base de un análisis llevado a cabo por el centro de investigación Basque Centre for Climate Change (BC3), en colaboración con otras entidades europeas, y cuyos resultados se han publicado en Nature.
El Dr. Dirk-Jan Van de Ven de BC3 y el resto de investigadores implicados en el estudio han examinado la evolución y los cambios en el sector energético y los sistemas socioeconómicos registrados por el IPCC durante una década. “Nuestro objetivo era observar si factores como las políticas y el avance de la tecnología han influido en las trayectorias trazadas por el IPCC. Por ejemplo, encontramos que escenarios sin políticas climáticas específicas muestran con el tiempo menores niveles de emisiones de CO2 debido a la caída de los costes de las tecnologías bajas en carbono y la reducción de las expectativas de crecimiento económico”, explica el experto de BC3.
Por otro lado, en el caso de vías de mitigación ambiciosas alineadas con un calentamiento global por debajo de 1,5-2°C, las trayectorias más recientes tienden a inclinarse hacia una mayor electrificación y una mayor proporción de energía renovable en la generación de electricidad. Al mismo tiempo, la dependencia del carbón, la energía nuclear, la bioenergía y la captura y almacenamiento de carbono (CAC) ha disminuido gradualmente debido a los costes cambiantes.
“A pesar de la reducción del presupuesto de carbono causada por políticas climáticas inadecuadas en las últimas décadas, no aumentaron las inversiones necesarias para limitar el calentamiento global por debajo de 1,5-2ºC gracias a proyecciones más optimistas sobre los costes de tecnologías bajas en carbono”, añade Van de Ven.
El análisis subraya la necesidad de una recalibración continua de los modelos y escenarios para seguir el ritmo de los avances tecnológicos, políticos y sociales, así como para mantener la relevancia política en la mitigación del cambio climático.
El artículo, publicado el 3 de enero en Nature Climate Change, ha sido elaborado como parte del proyecto de investigación “NDC ASPECTS”, financiado por el programa de investigación Horizonte 2020 de la Unión Europea.