2 millones de € para investigar en Euskadi el desarrollo lingüístico de bebés bilingües desde su nacimiento
Marina Kalashnikova, investigadora Ikerbasque de BCBL, es una de las beneficiarias de la convocatoria 2025 de las prestigiosas ayudas Consolidator Grant del Consejo Europeo de Investigación
Su equipo combinará diferentes técnicas avanzadas de observación y neuroimagen para realizar un seguimiento de bebés expuestos a euskera y castellano desde su primer mes de vida
Desarrollar el proyecto en Gipuzkoa permitirá encontrar una muestra homogénea de niños y niñas que aprenden los mismos dos idiomas
La investigadora Ikerbasque Marina Kalashnikova del centro de investigación Basque Center on Cognition, Brain and Language (BCBL) es una de las beneficiarias de la convocatoria 2025 de las prestigiosas ayudas Consolidator Grant del Consejo Europeo de Investigación (ERC).
Kalashnikova, líder del grupo de “Cognición y Lenguaje Infantil”, recibirá una financiación de 2 millones de euros por parte de la Unión Europea para llevar a cabo durante los próximos 5 años el proyecto Bilingual LENS. Esta iniciativa pionera busca identificar los factores neurobiológicos y ambientales que influyen en el desarrollo temprano del lenguaje en bebés expuestos a entorno bilingüe desde su nacimiento.
«La mayoría de los niños del mundo crecen adquiriendo más de un idioma. Sin embargo, gran parte de nuestro conocimiento sobre cómo aprenden el lenguaje se basa en investigaciones con niños monolingües. El proyecto Bilingual LENS cuestiona este enfoque», explica la experta de BCBL.
Para llenar este vacío científico, el proyecto realizará estudios longitudinales con niños nacidos y criados en Gipuzkoa que escuchan hablar euskera y castellano desde sus primeros días de vida. El seguimiento abarcará desde el primer mes hasta los 24 meses de edad.
«Nuestro objetivo será medir cómo las propiedades del entorno lingüístico al que están expuestos los bebés, así como su desarrollo cerebral durante el primer año de vida, predicen el desarrollo de sus habilidades lingüísticas en ambos idiomas durante el segundo año», añade Kalashnikova.
Tecnología avanzada
El estudio combinará técnicas de observación, neuroimagen y pruebas conductuales. Por un lado, mediante grabadoras especiales se evaluará y cuantificará cuánto habla escuchan los bebés en cada idioma durante las interacciones sociales en sus hogares.
Por otro lado, el equipo de BCBL empleará herramientas de neuroimagen complementarias para analizar las respuestas cerebrales: la electroencefalografía (EEG), que ofrece una alta resolución temporal para detectar la velocidad de procesamiento del habla, y la espectroscopia funcional de infrarrojo cercano (fNIRS), que permite localizar en qué partes del cerebro se produce la actividad.
«El uso de estas tecnologías avanzadas nos permitirá comprender cómo las partes específicas del cerebro del bebé bilingüe se especializan para procesar el lenguaje con el tiempo», precisa la investigadora.