BIOLAN logra la máxima certificación internacional para un biosensor que permite a la industria pesquera medir la concentración de sulfito en crustáceos
Se trata del segundo gran reconocimiento internacional a la fiabilidad de la tecnología desarrollada por la biotecnológica con sede en el Parque Científico y Tecnológico de Bizkaia y apoyada desde sus inicios por el Gobierno Vasco a través del Grupo SPRI
BIOLAN, compañía vasca especializada en tecnología analítica aplicada al sector agroalimentario, acaba de lograr una certificación internacional para un nuevo biosensor que permite a la industria pesquera medir la concentración de sulfito en los crustáceos de forma precisa y competitiva en costes. Este reconocimiento viene avalado por parte de AOAC, el instituto científico de referencia en el mundo en esta materia. BIOLAN comenzó su andadura en 2006 y contó con el apoyo del Gobierno Vasco a través del Grupo SPRI. Con sede en el Parque Científico y Tecnológico de Bizkaia, se trata de la primera empresa en el mundo que diseña y desarrolla biosensores para el sector alimentario.
En la industria de los crustáceos, el sulfito se añade para prevenir la melanosis, una enfermedad que altera algunos tejidos por exceso de melanina y pone la cabeza del langostino negra. Pero el sulfito puede convertirse a su vez en un compuesto alérgeno con efectos adversos que puede causar en la salud humana. De ahí la importancia de que la industria dedicada a la captura y procesamiento de crustáceos –singularmente langostinos– pueda monitorizar la concentración de este compuesto para cumplir la normativa existente y garantizar la seguridad alimentaria.
Fuente: Grupo Spri