Cámaras para vigilar las mareas en Bakio
La principal novedad de este año es la implantación de un proyecto piloto, denominado Kosta System y diseñado por Azti-Tecnalia. Pretende ser una herramienta de gestión de playas mediante técnicas de monitorización costera. La playa de Bakio será el conejillo de indias. Cuatro cámaras instaladas en la azotea de un edificio grabarán la costa las 24 horas. Esa información llegará a un software de Azti-Tecnalia y el sistema informático dibujará el comportamiento de la playa, sus mareas y los flujos de bañistas mediante una simulación numérica. Costará más de 90.000 euros a las arcas forales.
Tal y como explicó el técnico Eduardo Oleaga, «los litorales son dinámicos y este sistema de monitorización permitirá delimitar la línea de costa, adelantarse a las variaciones de los fondos arenosos, calcular la densidad de usuarios, localizar corrientes marinas, delimitar las zonas seguras para bañistas y aporta información para la navegación y la práctica de deportes acuáticos». Tras recibir las imágenes, el software es capaz de simular la imagen de la playa «a vista de pájaro y a vista pez», explicaron los responsables de este proyecto.